niños calle

    No hay nada más hermoso que el amor de Dios

    Jesús dijo: “Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque el reino de los cielos es de quienes son como ellos”.

    Semanas antes, las hermanas Marianitas prepararon a las niñas para recibir sus sacramentos y ellas muy entusiasmadas se dedicaron mucho y aprendieron que tener fe es encontrar a Dios, el que sostiene y concede la promesa de un amor indestructible.